¿Cómo repellar una pared con cal?

Repello cal construcción

En artículos anteriores hemos explicado los diferentes usos que tiene la cal para construcción, en esta ocasión se detallará cuál es la mejor forma de repellar una pared con cal para aprovechar al máximo sus beneficios.

Materiales para la preparación del repello

Para repellar una pared con cal, se debe iniciar con la elección de los materiales a utilizar para la preparación del repello. Así como la adecuada verificación de la pared a repellar, en cuanto a su correcta preparación para que el mortero pueda adherirse completamente a la superficie. El repello tradicional está constituido por cemento, cal, arena y agua. Es importante considerar que la calidad de los materiales, así como el tamaño máximo nominal de la arena influyen considerablemente en la calidad y trabajabilidad del repello final.

Definidos los materiales a utilizar para la formulación del repello, se debe de elegir el proporcionamiento adecuado de acuerdo a las indicaciones de HORCALSA. Dado que de esto también depende el éxito en la trabajabilidad, desempeño y calidad, que tendrá el mortero durante su aplicación y acabado final.

La verificación de la pared a repellar se debe de hacer identificando si existen secciones demasiadas lisas, así como superficies sucias o imperfectas. Si la pared a repellar cuenta con superficies muy lisas se deben pre-tratar. Esto se realiza haciendo pequeños punzones con un cincel para mejorar los puentes de adherencia entre la base y el repello. Si la pared se encuentra sucia debe lavarse, hasta lograr la total remoción de la suciedad, frente a imperfecciones, estas deben de ser reparadas previo a la aplicación del repello.

Asegurada la calidad de la superficie se procede con la aplicación de agua, hasta alcanzar la saturación. La preparación del mortero debe hacerse sobre una superficie limpia, plana y no absorbente. Iniciando con el mezclado de los materiales secos, arena, cal y cemento. El mezclado de los materiales se detiene hasta lograr una mezcla homogénea y se agrega agua, hasta alcanzar la trabajabilidad y consistencia adecuada del mortero.

Preparado el mortero, se procede a la evaluación de la pared respecto a la humedad. Si esta se encuentra seca se rocía un poco de agua evitando empaparla e inmediatamente se aplica el repello de forma lanzada o untada, mediante el uso de una llana, plancha de madera o plancha de metal. Aplicada la capa de mortero, se procede a dar un tiempo prudente (tiempo abierto). Donde el material alcance la consistencia adecuada para finalizar el acabado al espesor permitido mediante el uso de plancha de madera.

Con la finalidad de lograr un repello final de calidad es necesario curar la aplicación, dependiendo de las condiciones de humedad y temperatura. De tal manera que para condiciones ambientales secas con temperaturas por arriba de 25°C, por ejemplo, el repello debe de ser curado aproximadamente 6 horas después de haber finalizado la aplicación. Continuando con la humidificación por al menos 7 días, dos a tres veces al día.

Si deseas conocer más de otros usos de la cal para construcción, puedes revisar nuestro blog aquí.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *